¿Necesito brackets?
Los tratamientos ortodónticos sirven para corregir problemas como los dientes apiñados o torcidos, el retrognatismo y el prognatismo, la posición incorrecta de la mandíbula o los trastornos de la articulación temporal.

En un inicio, los tratamientos de ortodoncia como los brackets están encaminados a corregir cualquier problema relacionado con la maloclusión dental: apiñamiento, dientes rotados, mordida abierta, presencia de espacios entre las piezas dentales –o diastemas-, mordida cruzada o sobremordida.
Los pacientes con problemas ortodónticos pueden beneficiarse de estos tratamientos desde temprana edad. La edad ideal para ponerse brackets está entre los 10 y los 14 años, cuando la cabeza y la boca aún están en fase de crecimiento y es más fácil enderezar los dientes. Pero si no lo hiciste en su momento por la razon que fuera y crees que ya no tienes edad para iniciar un tratamiento de ortodoncia, te sorprenderá saber que uno de cada tres pacientes son adultos que han decidido mejorar la estética de su sonrisa.
Suele haber tres tipos de brackets: el tipo más popular son los brackets metálicos o de plástico, que se adhieren a los dientes y pasan mucho más desapercibidos. La ortodoncia “lingual” consiste en brackets que se unen a la parte posterior de los dientes, ocultos a la vista. Las bandas metálicas son el tipo clásico que más parte del diente cubre, ya que rodean el diente. Todos usan alambres para mover los dientes hasta la posición deseada.
Acude a las revisiones pautadas por nuestros especialistas, respetando los plazos recomendados. De esta manera, nuestra ortodoncista llevará un seguimiento exhaustivo de tu caso.